CONCIERTO: Un Hecho, un Derecho y una Fórmula de Pasado, Presente y Futuro.

Me resulta especialmente grato tener la oportunidad de presentar esta conferencia en un momento tan  relevante para nosotros y para muchos vascos no sólo del PNV. En el punto intermedio entre la votación relativa al denominado "blindaje" del Concierto Económico por una parte, y las conversaciones y, en su caso, negociaciones presupuestarias por otra en el marco de la situación social, económica y política hasta la superación del bloqueo apuntada en la conferencia anterior.

 

La exposición la dirigiré hacia estos dos temas de actualidad, que voy a utilizar para definir nuestra posición política hoy así como nuestra propuesta de cara al futuro partiendo de lo vivido en los últimos meses.

 

El escenario político e institucional actual en la C.A.P.V.-Euskadi.-

 

Permítanme que comience y que lo haga por el principio, por el día 1 de marzo del presente año en que se celebraron las Elecciones al Parlamento Vasco. Estos comicios dieron lugar a la conformación de un nuevo Gobierno sustentado en un acuerdo entre el Partido Socialista y el Partido Popular. "Lo imposible posible", "Lo extraño normal". Algo inimaginable aquí en Madrid, pero que es posible tanto en la Comunidad Autónoma Vasca como en Navarra. Los "polos opuestos puestos de acuerdo".

 

Los partidos firmantes hablan hoy en boca del Lehendakari López del "oasis vasco" cuando se refieren a Euskadi. Mi intención es aportarles a uds. los datos de la sociología electoral, para que en su día no se lleven ustedes la sorpresa de ver convertido el  pretendido oasis en lo que en realidad es: un "espejismo".

 

Primero, por más que se empeñen y lo repitan, la sociedad vasca y su sociología política no ha cambiado. Podrá cambiar, pero no ha cambiado. El primer partido sigue siendo el PNV, con 80.000 votos más, 8 puntos porcentuales  más y 5 parlamentarios más que el PSE. Los partidos que conformaron el anterior Gobierno tripartito obtuvieron 10.000 votos más que la suma del PSE y el PP. Y, por último, casi 100.000 personas votaron nulo, y les puedo asegurar que ninguna de ellas respalda ni  comparte la fórmula del actual Gobierno como tampoco lo hacen con el PNV. No trato, por lo tanto, de hacer guiño alguno a nadie con interpretación subjetiva sesgada.

 

Lo que sí ha cambiado en Euskadi ha sido la realidad institucional y política. El PSE y el PP cuentan con mayoría absoluta en el Parlamento, 38 sobre 75, con la ausencia de la hipotética representación parlamentaria de la izquierda autodenominada abertzale, y esto  ha permitido acceder al Gobierno al PSE, a pesar de no ser la primera fuerza, con sus 25 parlamentarios y su 30% de los votos. Es un Gobierno legítimo. Sin duda. Pero es un Gobierno que no refleja ni responde a la realidad de la mayoría social de Euskadi. Y  es un Gobierno constituido sobre un pacto que no cuenta con el respaldo ni el beneplácito de la sociedad. Así lo atestigua el último Estudio del CIS: más de un 60% de las-los ciudadanos de la CAPV no comparten el acuerdo PSE-PP que sustenta este Gobierno, y su respaldo social es inferior al 20%.

 

Esta es una visión objetiva de la realidad.

 

Añado, es un Gobierno débil. Los datos así lo demuestran, pero, además, hay un elemento que confirma esta debilidad. Tenemos "un Gobierno sin programa de Gobierno", un Gobierno sin calendario legislativo. Es una situación insólita. Estoy seguro de que uds. aquí lo comprenden perfectamente: el PSOE y el PP representan dos modelos radicalmente diferentes, no están de acuerdo en nada... y, por lo tanto, no es fácil que puedan suscribir un mismo programa. De hecho no lo han podido hacer. Y creo que ya ni lo van  a intentar.

 

La simplificación del panorama político.-

 

El acuerdo PSE-PP en Euskadi ha traído consigo una simplificación del panorama político vasco. Hemos pasado del rombo al triángulo. Hasta la fecha la realidad y la prospección del futuro político de la CAPV- Euskadi se conformaba en torno a cuatro espacios ubicados en relación a dos ejes. El primer eje es el discutible tradicional izquierda-derecha, el eje social podríamos decir. Y el segundo, con mayor grado de incidencia, es el de adscripción nacional, con partidos nacionalistas vascos o de obediencia española.

 

Ahora el rombo de los cuatro espacios se simplifica, y el futuro se dibuja en torno a un triángulo. En un vértice se encuentra el nacionalismo vasco institucional, cuya fuerza hegemónica es el PNV. En el segundo vértice se encuentra la alianza estratégica entre socialistas y populares. Y en el tercero, el polo de la izquierda abertzale radical, legalizada, ilegalizada, institucional o no institucional.

 

El propio PSE en el texto-base de su ponencia política para su reciente Congreso incluyó la extensión y aplicación de su alianza con el PP a las próximas Elecciones Municipales y Forales. El PP está interesado sin ninguna duda. Ahora bien, el PSE consciente de que la aceptación pública de esta estrategia no cuenta con el apoyo de la mayoría de la sociedad vasca, procedió a ocultarla. Han celebrado su Congreso hace diez días mas todavía no han presentado la Ponencia política resultante. No deja de resultar curioso. Estaremos atentos a la redacción y sus eufemismos. A lo mejor resulta que abrazan ahora los valores de la "ambigüedad". Una ambigüedad con la que, según convenga, tanto gusta identificar al PNV.

 

En cualquier caso, creo no pecar de agorero temerario si afirmo que, en base a la experiencia acumulada y a la fórmula de "signo de normalidad" con la que se identifica toda actuación del PSE condicionada por el apoyo del PP,  nadie en esta sala tiene duda -salvo que sea consciente de la fuerza de la resaca que puede provocar o que identifiquemos una estrategia de Estado como una táctica de condicionamiento- de que esa alianza -la alianza entre PSE y PP- se aplicará -si los números lo permiten- en 2011. Y si nadie en esta sala tiene duda... en la CAPV el PSE y el PP tampoco la tendrán. Porque allí actuaran de la manera que se les indique desde aquí.

 

Este es, por lo tanto, el panorama derivado de las últimas Elecciones autonómicas y el Acuerdo de Bases entre PSE y PP, sin olvidar el antecedente de lo sucedido en la Comunidad Foral de Navarra.

 

 Y ante esta realidad, ¿cuál ha sido la  actitud de nuestro Partido?

 

 

La actitud del PNV.-

 

Nuestro Partido ganó las Elecciones el día 1 de marzo pasado. Y lo hizo con claridad. Pero esa misma noche del 1 de marzo, Patxi López anunció su "acuerdo para el cambio" con el PP.

 

Durante la campaña electoral había negado esta posibilidad. Sin embargo, realizado el escrutinio, la anunció. No consideró ni dio otra opción. Quedó claro que existía un compromiso previo de acuerdo entre PSE y PP. Un compromiso que pudiera parecer propio del PSE con el afán de "desalojar" al PNV de la responsabilidad de gobierno y que contaría con el apoyo del PP y, si fuera necesario, de UPyD. No obstante, lo sucedido año y medio antes en Navarra nos invita a realizar, cuando menos, otras reflexiones sobre objetivos finales y compromisos compartidos o no. Nada, en todo caso, tiene que ver con el discurso de la transversalidad entre ejes identitarios y sociales defendido tan profusamente por el PSE en años anteriores como también durante la propia campaña electoral de las elecciones al Parlamento Vasco.

 

Nuestra actitud inicial fue de asombro. El PSE era la segunda fuerza, y su campaña electoral había rechazado la posibilidad de la conformación de ningún acuerdo estratégico con el PP. Aun así, nuestra actitud fue constructiva. Y desde el primer momento tratamos de negociar un Gobierno fuerte, de estabilidad, con un pacto más amplio y un programa de Gobierno centrado en la prioridad de la lucha contra la crisis. El PSE no dio opción. Su decisión estaba tomada.

 

Hay quien dice que no supimos digerir esta situación. Les aseguro que no es fácil. Sitúense en los resultados y en las formas y en el fondo.  Pero, en cualquier caso, nuestra primera decisión fue ubicarnos en la realidad y diseñar una actitud institucional responsable, constructiva y en defensa de los intereses de Euskadi. Una actuación en base a contenidos. Una actuación que difícilmente se puede identificar de oposición debido al desconocimiento de Programa de Gobierno alguno. Una actuación, en todo caso, consecuente con ser el grupo parlamentario más numeroso y un Partido con responsabilidad de gobierno en el conjunto del entramado institucional de la CAPV.

 

Así, nuestra primera propuesta fue, tras la puesta a disposición del Lehendakari López lo que entendemos han de ser los diez ejes de actuación futura, ofrecer un Acuerdo de Estabilidad Institucional  y Presupuestaria con la prioridad de afrontar unidos la lucha frente a la crisis.

 

El Acuerdo de Estabilidad.-

  

Voy a detenerme en esta Propuesta porque la oferta está vigente y es de plena actualidad.

 

¿Por qué lo hicimos? Porque la situación económica es muy grave, y el impacto a modo de desempleo y recursos institucionales disponibles es creciente.

 

¿Cuál es nuestro objetivo? Llegar al máximo consenso posible de cara a establecer unas bases de futuro en política fiscal y políticas sociales, según la experiencia actual, y con una concreción en la facilitación de los presupuestos 2010 del Gobierno Vasco, las Diputaciones Forales y  Ayuntamientos. Pactar unas prioridades de actuación y aplicarlas en todos los niveles institucionales.

 

Este mismo planteamiento lo hemos extendido ante la situación española, tras el debate de política económica recientemente celebrado en el Congreso de los Diputados. Y luego me centraré en este tema.

 

La Propuesta en la CAPV-Euskadi.-

 

Nuestra prioridad es que Euskadi cuente con una política económica seria.

 

Una política económica que ponga los puntos sobre la "íes":

-La i de inversión en infraestructuras. Nuestra propuesta es centrar el esfuerzo inversor en la realización de grandes infraestructuras. Recuperar el Plan de Aceleración Económica que suscribieron el Gobierno Vasco y la tres Diputaciones Forales hace año y medio, y que comprometía una inversión conjunta de más de doce mil millones de euros. Ante la crisis, debemos acelerar la inversión pública.

-La i de industria. Incrementando el apoyo al tejido productivo vasco, y ampliando la red de parques tecnológicos y empresariales.

-La i de innovación. Ampliando, y no reduciendo, las ayudas a la investigación e innovación en las universidades y en las empresas. Apostando decididamente por la inversión en I+D+i. Polinomio al que añadiríamos la "k" como símbolo de seña de identidad.

-La i de internacionalización. Consolidando, y no cerrando, la red de centros de apoyo a las empresas en el extranjero.

-Y la i de impuestos o de política fiscal. Unido a la política de gasto y endeudamiento.

 

Este apartado es el mejor exponente del "desbarajuste socialista", embarcado a nivel estatal, hasta ahora, en una política errática y cortoplacista. Una política que, de forma previa a su aplicación, está consiguiendo desmotivar tanto la inversión como el consumo, dos objetivos prioritarios para la recuperación económica. Las empresas no invierten, las familias no consumen si están escuchando al Gobierno diariamente decir que va a subir los impuestos. La "noria de los  impuestos" que puso en marcha el Gobierno español este verano resulta incomprensible.

 

Nuestra postura en Euskadi en este caso ha sido clara: ni subir los impuestos como propone el modelo  socialista, ni bajarlos como propone el popular. Los impuestos están más o menos bien donde están tras las modificaciones habidas en años recientes, y cualquier ajuste debe realizarse con una visión estructural y de medio plazo con un ofrecimiento de estabilidad, de certidumbre. Para que no ocurra, por ejemplo, lo que ha ocurrido con los electoralistas 400 euros.

 

En definitiva, nuestra apuesta es la propuesta de  una política económica. Una política seria, responsable y estructural. Cuanto antes y más extenso sea un Acuerdo en tal sentido, mejor.

 

Esta prioridad que marcamos en Euskadi es también, según la representación que ostentamos, nuestra orientación de cara a la situación del Estado.

 

Propuesta de Estabilidad, en base a la bilateralidad, para afrontar la situación a nivel de Estado.-

 

Si la situación económica y de desempleo es difícil en Euskadi, lo es en mayor medida en el Estado. Y nuestra disposición es la de actitud ofrecer, en el discurso y actitud del Grupo Vasco en el Congreso y el Grupo Nacionalistas en el Senado, también aquí una extensión propia de la Propuesta de Acuerdo de Estabilidad.

Se habla mucho de los Presupuestos Generales del Estado pero nuestra responsabilidad es la que es y nuestra preocupación va mucho más allá. Por eso hemos incorporado tres temas previos que me parece importante contextualizar y presentar:

Estos tres temas se pueden sintetizar en una única palabra: Autogobierno.

Autogobierno significa "blindaje del Concierto Económico", es decir, la regularización de las Normas Forales Tributarias. Autogobierno es cumplimiento con el pago de la deuda del IVA por parte del Estado a la Diputación de Alava;  y Autogobierno es consecuencia con el Estatuto y Parlamento Vasco en cuanto a la transferencia de la competencia de las Políticas Activas de Empleo.

Reclamamos lo que es de ley, y por eso lo establecemos como condición previa a la conversación-negociación presupuestaria.

El llamado "blindaje" del Concierto Económico es de ley. Porque si no se blinda, no es Concierto. La Constitución, el Estatuto Vasco y el Navarro, recogen la singularidad del Concierto Económico y del Convenio en el caso de Navarra. Una realidad histórica, que debidamente actualizada se ha demostrado eficaz. Pero para ser eficaz debemos respetarla y ese es el objetivo del denominado "blindaje". Significa otorgarle el rango que merece. Como sucede con el Convenio Económico navarro. Nadie pretende que las Normas Forales no puedan ser recurridas, pero proponemos que se haga a través del Tribunal Constitucional. Todos los partidos políticos vascos con representación en el Parlamento Vasco, excepto EHAK en su momento, estamos de acuerdo en ello, y así lo aprobamos en el Parlamento Vasco. Sólo  pedimos que aquella resolución, tras los acuerdos en la Juntas generales de los Territorios, se respalde y apruebe también en la Cortes Generales.

El pago del IVA por los vehículos importados en el período de 1990 a 2005 es de ley. El sistema del Concierto establece que cuando existe una discrepancia entre la Comunidad y el Estado, se recurrirá a la Junta Arbitral del Concierto. Hasta la fecha, en las ocasiones en que hemos recurrido a la Junta y ésta ha dictaminado, primero se ha solventado el tema económico, y a continuación cada institución ha valorado la oportunidad de presentar un recurso. En el caso que nos ocupa, la Junta Arbitral ha dado la razón a la Diputación de Álava, por lo que el Estado tiene que, primero, abonar los 456 millones de euros, tal y como establece la Junta Arbitral, y luego presentar el recurso. Es lo que se ha hecho siempre. Y es de ley. El Estado se niega y se escuda en el recurso, aún cuando no haya solicitado la suspensión de la Resolución. Nosotros reclamamos sólo lo que es de ley.

Y la transferencia de la competencia de las Políticas Activas de Empleo es de ley. Es una competencia recogida por el Estatuto de Autonomía de Gernika, que data de 1979. El anterior Gobierno Vasco la valoró en 450 millones de euros, el actual -por lo que leemos- la ha rebajado a 300. Lo único que hemos pedido es transparencia. Se trata de un cálculo "matemático", y, por tanto, con transparencia alcanzaremos un acuerdo no sólo en la cuantía sino en su contenido. La competencia corresponde a la CAPV-Euskadi. lo dice el Estatuto. Es también de ley.

En definitiva, estos son nuestros planteamientos de partida. Defensa del Autogobierno y del Estatuto, en los términos en los que éste fue aprobado por la sociedad vasca de la CAPV en el año 1979. Por supuesto, sin renuncia a nuestros principios fundamentales e ideológicos. En democracia a nadie se le exige renuncia si sus principios son democráticos y su actitud la del respeto a las reglas de juego. Dos cuestiones sobre las que nadie puede decir nada al PNV a lo largo de toda su historia.

El próximo día 25 de octubre se cumplen 30 años de incumplimiento del Estatuto. Una Ley orgánica que tiene 36 materias  pendientes de ser transferidas, según consta en otra resolución también unánimemente aprobada por el Parlamento Vasco. Aprobada, por lo tanto, con los votos también del Partido Socialista de Euskadi y del Partido Popular del País Vasco.

Una vez más tan sólo reclamamos el cumplimiento de la ley. De esta ley orgánica. Eso sí, en su espíritu y su letra. Admitiendo una realidad incuestionable, como es la singularidad vasca. El propio Concierto y el Convenio de la CAV y Navarra, son el mejor exponente de esta singularidad. El Estatuto así la recogió. Así lo aceptamos. Y así lo vamos a defender. No sólo en este tiempo de apuesta por herramientas de Autogobierno para abordar con más garantías y según nos corresponde la situación pero también por ello.

Espero haber sido lo suficientemente claro. La propuesta de Acuerdo de Estabilidad "ha partido de nuestro Partido". Hemos hecho la oferta en Euskadi y la hemos extendido en el debate habido en el Congreso de los Diputados, siendo que pudiera tener su extensión a la negociación de los Presupuestos Generales del Estado.

Lo hacemos desde la responsabilidad ante una situación económica excepcional. Partimos por tanto del "interés general". Tres cuestiones que no son beneficio de Partido sino cumplimiento para con la CAPV-Euskadi.

Ofrecemos la estabilidad exponiendo con claridad cuáles son nuestros objetivos. Que son, sin ambigüedades, la defensa de los intereses de Euskadi.

Y manifestamos nuestra disposición a negociar partiendo, lógicamente, de un planteamiento previo: resolver tres temas que son "de ley", que son "de fuero". Resuelto  el "fuero" ya pasaremos "al huevo". Lo dije en el recién celebrado "Día del Partido": "si hay que negociar, negociar; si es posible acordar, acordar; Y siempre, siempre, cumplir la palabra".

Somos conscientes de que el Gobierno de Rz. Zapatero está en su peor momento. Sabemos que acercarnos es una opción de riesgo. Pero la crisis económica no se desacelera sola, la estabilidad económica e institucional es necesaria, y asumimos este riesgo desde la reivindicación del cumplimiento con la bilateralidad.

Del Concierto Económico al Concierto Político.-

Miremos, por lo tanto, al futuro.

La mirada en cuanto a la situación política en Euskadi nos la nubla siempre el cruel terrorismo de ETA, la persistencia de esa tragedia nacional de Euskadi. ETA ha cumplido 50 años y su balance es muerte, sufrimiento y destrucción. Ni es ni va a ser nada más.

Les ruego que me concedan un poco más de su interés en este punto y me permitan que señale nuestra visión global en cinco puntos, además de reiterar lo dicho en la intervención última en este mismo Foro:

-Primero. El final de ETA depende de su propia decisión. Así como de la asunción y afirmación de la incompatibilidad absoluta entre violencia y política.

-Segundo. Nuestro compromiso es seguir trabajando en el debilitamiento de ETA, tanto en el plano organizativo como en el social, deslegitimando la violencia.

-Tercero. Quiero que comprendan que los nacionalistas somos los primeros interesados en la deslegitimación ética y política del discurso de la violencia. Y estamos firmemente comprometidos con ella.

-Cuarto. El debate sobre el diálogo es estéril. No debemos enzarzarnos en valorar su idoneidad, sino su eficacia. Y su eficacia parte de que se den las condiciones de "cierre definitivo de la persiana del terrorismo". En estas condiciones el diálogo es sinónimo de fortaleza de la democracia.

-Y quinto. La lucha contra el terrorismo no debe ser utilizada como arma arrojadiza y electoral. Es  momento de que los partidos políticos hagamos un diagnóstico compartido y actualicemos los acuerdos habidos desde el Pacto de Ajuria-Enea incluído el mismo.

Sobre estas bases nuestro objetivo es articular un Acuerdo que nos permita abordar unidos la lucha para acabar con la violencia, sin menoscabo de las aspiraciones políticas de cada partido. Vamos a trabajar en silencio en beneficio de la sociedad, que nos marca el territorio con claridad y nos demanda una solución.

Nuestro compromiso es el del trabajo integral y en discreción.

Retomo ahora la mirada al futuro. Sin olvidar u obviar el terrorismo, pero tratando de que no se convierta en el condicionante de nuestra acción política.

Durante el año pasado EAJ-PNV, primer partido político de la CAPV-Euskadi, llevamos a cabo una reflexión de presente y futuro. La denominamos Think Gaur Euskadi 2020. Esto es, pensar hoy la Euskadi de 2020. Una respuesta a las necesidades de una sociedad moderna, abierta y europea.

Concluimos en  un documento que me atrevo a recomendarles con humildad. Es un estudio sobre las políticas públicas más avanzadas en el mundo desarrollado, y una aplicación específica de las mismas a la realidad y las necesidades de Euskadi en el horizonte de 2020.

En el terreno de la política, la propuesta que realizamos es de plena actualidad. En el campo económico, el Concierto nos ha ofrecido un marco de acuerdo, bilateral, fundamentado en la historia, y que ha resultado eficaz.

Nosotros proponemos  la traslación de este "hecho y derecho histórico" que simboliza el Concierto Económico al marco de la relación política. Proponemos así el Concierto Político. Aspiramos con ello  también a un marco de acuerdo, bilateral, que entronque con una lectura actualizada de los derechos históricos, y que resulte eficaz para la convivencia política normalizada.

Un acuerdo que nos comprometa a todos, sin perjuicio de lo que en cada momento la decisión democrática de una mayoría social estime como mejor futuro para el Pueblo Vasco. Porque nada es invariable ni inamovible pero también es verdad que toda sociedad necesita de unas certezas mínimas. Económicas, sociales y también políticas.

He comentado anteriormente que hemos estado cerca de la paz. A ETA corresponde facilitarla. Es su obligación. A la sociedad y a sus representantes corresponde gestionarla. A los partidos nos corresponde garantizar la convivencia, en una sociedad plural, con visiones y aspiraciones políticas diferentes. Nos corresponde garantizar una convivencia en la que todas las ideas puedan ser defendidas y conseguidas en democracia, paz y libertad. El Concierto Político puede ser un modelo para propiciarlo.

He comenzado hablando de la realidad socio-política de la CAPV-Euskadi, y concluyo retomándola. He comenzado hablando de la realidad institucional y política, y concluyo también retomándola. Nos corresponde realizar una propuesta que comprenda esta realidad, que la entienda y la integre. El Concierto Económico es una fórmula de éxito. Y lo es,  entre otras cosas, no ya porque no sea un privilegio sino un derecho y un hecho histórico, ni tampoco porque sea una fórmula matemática perfecta sino que requiere del acuerdo permanente. Lo es también porque es la asunción de ejercer la responsabilidad propia asumiendo los riesgos que ella representa. Con esas premisas, funciona.

El Concierto es un modelo. Actualiza la historia. Respeta la singularidad. Funciona desde la bilateralidad. Y garantiza un desarrollo en convivencia. Nosotros proponemos un modelo. Euskadi lo necesita y, si me lo permiten,  España también.

Muchas gracias a todas y todos. Eskerrik asko!.