Bilbao; "No hay que mezclar la consulta con nuestros acuerdos con el PSE"
José Luis Bilbao acaba de cumplir el primer año de su segunda legislatura como máximo responsable foral. Apoyado en un Gobierno en minoría tras cuatro de mayoría absoluta, el diputado general se ha embarcado en esta primera parte de su nuevo mandato en proyectos multimillonarios que, según dice, ayudarán a «mitigar» los efectos de la «crisis con mayúsculas» que se avecina.
-En un mes ha anunciado proyectos que superan el presupuesto de los once departamentos forales (1.300 millones). ¿Queda margen de maniobra para acometer otro tipo de actuaciones en un momento de crisis económica?
-Tenemos margen de maniobra porque llevamos varios años en los que no hay nuevo endeudamiento. La salud financiera de la Diputación es muy buena. Estamos entrando en una crisis económica con mayúsculas y, dentro de nuestro ámbito de actuación, defendemos la teoría de que el sector público debe inyectar actividad en el sistema. Si hace falta recurriremos a endeudamiento.
-Una de las críticas que le han dirigido es que estos proyectos resultan insuficientes desde el punto de vista de la reactivación económica.
-Estoy de acuerdo. Sería un pedante si dijera que con esto resulta suficiente. No tenemos en nuestra mano instrumentos importantes de política económica. En una economía abierta y globalizada, si la economía europea se constipa, también lo hacemos nosotros. ¿Qué conseguiremos con esto? No tengo ni idea. Pero podremos aumentar la generación de actividad económica y mitigar los efectos de la crisis.
-También se subraya que son iniciativas poco progresistas y que responden a un modelo clásico, keynesiano, de actuación pública.
-Aparte de economista malo, yo soy keynesiano. Estos no son los modelos neoliberales de la escuela de Chicago, de George Bush y de Margaret Thatcher. Esto en Europa se entiende como medidas progresistas de política económica.
-Los últimos datos indican que la macroeconomía vasca está aguantando la crisis mejor que la española. Pero no ocurre lo mismo con la economía doméstica.
-Estamos en un periodo parecido a los años 70. Se está extendiendo una sensación de pánico, de que las cosas van peor de lo que van. Pero creo que aquí, por estructura económica, estamos en buenas condiciones para salir con un poco de tranquilidad de esto. Lo que hay que ser es serio. Si hay crisis, decir que hay crisis, no una fase de ralentización económica. Si algo se le puede criticar al Gobierno español es que ha estado transmitiendo una realidad falsa.
-Recalca que no va a reducir la inversión en Acción Social, el Departamento con mayor presupuesto. ¿Es viable mantener ese volumen de gasto en la situación económica actual?
-No sólo se puede, también se debe. El otro día escuché un debate de radio en el que participaron algunos ilustres apoderados y en el que se repitió un comentario que he oído muchas veces. Decían que donde mejor está el dinero es en el bolsillo de los ciudadanos, no en manos de las instituciones. Eso es mentira y tramposo. Eso dicen los ricos, los poderosos y los privilegiados.
-Vayamos por partes. ¿Tiene futuro el Guggenheim de Urdaibai si no recibe apoyo de otras instituciones?
-Tiene un futuro clarísimo.
-¿Aunque no se sume el Gobierno vasco?
-El Gobierno estará. Lo que ocurre es que, en muchos momentos de la vida, alguien tiene que tirar del carro. El proyecto está muy claro. Pero se oyen muchas cosas por ahí.
-¿Se va a construir un hotel de lujo en Urdaibai?
-Hay gente que tiene que hablar por no callar, que monta debates sin ninguna base. Urdaibai tiene un sistema que compatibiliza la protección completa de su entorno con la actividad humana. No se va a tocar ningún área protegida ni se va a plantear ninguna recalificación. Tampoco se van a hacer chalés ni campos de golf ni nada por el estilo.
-Después de que el Gobierno vasco asegurase que éste era un proyecto de la Diputación, ¿se ha arrepentido de anunciarlo en solitario?
-No. Siempre hay un momento en el que se rompe la cáscara del huevo y sale lo que hay dentro. Esto está dentro del plan interinstitucional.
-¿Qué plazos maneja?
-Antes de empezar a construir tiene que estar terminada la alternativa para las colonias de la BBK. Todavía hay que hacer un concurso de ideas, ver cuál es la mejor para la zona. Por otro lado está el proyecto museístico. Va a existir una parte clásica con sus programas de exposiciones y otra más didáctica, de talleres, más innovadora. Todo esto tiene que ir en paralelo a la actuación de la BBK en la finca de Ea.
«Nosotros gobernamos»
-En el caso de las autovías, se trata de infraestructuras que estaban previstas desde hace muchos años.
-Proyectos nuevos, como innovadores, no existen. Tenemos un plan de carreteras en el que, desde hace muchos años, se establecen cuáles son las necesidades. Lo que pasa es que hay que ponerles plazos y dinero. Todo no se puede hacer a la vez.
-Precisamente se ha criticado que se hayan presentado estas infraestructuras cuando hay abierta una ponencia en Juntas para definir cuáles deben ser las prioridades de ese plan.
-Esto es algo importante y me cabrea un poco. Vamos a llevar estos proyectos a la ponencia. ¿Pero hay que pedirle permiso a alguien para poder lanzar una idea? Mire usted, nosotros gobernamos. Es nuestra obligación.
-¿Qué opina del rechazo generalizado a los centros de menores en situación de desprotección?
-Veo de todo. En más de un caso veo egoísmo. A todo el mundo le gusta que haya un contenedor de basura debajo de su casa, pero no en su portal, sino en el de al lado. El de al lado dice lo mismo y, al final, se monta la bronca. En este caso, nos olvidamos de que los que vienen por aquí no lo hacen para pasar unas vacaciones.
-En el caso del centro de Laukiz, van a acudir a los tribunales.
-Es muy sencillo. El Ayuntamiento no nos da la licencia de obras y nosotros entendemos que tenemos derecho. Los tribunales dirán quién tiene la razón.
-También tienen problemas con las voladuras nocturnas en el barrio de Ugarte, en Trapagaran.
-Toda obra tiene molestias, hasta cuando la haces en el baño de tu casa. Ya hemos dicho a la constructora que no las haga de noche. Lo único que podemos hacer es pedir disculpas a los afectados.
-¿Se ha pasado Vizcaya de solidaria con las basuras de Guipúzcoa?
-Yo creo que no. Hemos dicho que sí a que venga una parte de las basuras de Guipúzcoa durante un periodo de tiempo cuando ellos han encauzado el problema. Aquí, afortunadamente, tenemos aprobado con un consenso muy amplio el plan de gestión de residuos urbanos. Sólo EB está fuera, pero también su basura se trata en ese plan de residuos.
-¿Cómo valora este primer año de Gobierno en minoría?
- Estamos demostrando que se puede gobernar en minoría. Tenemos la suficiente fortaleza y la capacidad de llegar a acuerdos con los demás para que esto funcione.
-A la vuelta de las vacaciones empezarán las negociaciones de los presupuestos.
¿Confía en llegar a un nuevo acuerdo con el PSE?
-Con el PSE o con quien sea. No tengo prejuicios para pactar. Todavía es pronto para hablar del presupuesto de 2009. En agosto tendremos los datos del cierre de la recaudación del mes de julio. Entonces pondremos encima de la mesa las líneas del presupuesto para empezar a negociar. Pero, como hay elecciones enseguida, igual nadie quiere negociar con nosotros.
-¿Influirá la paralización de la consulta de Ibarretxe en el Constitucional en las buenas relaciones que mantienen con el PSE?
-No me gusta mezclar las cosas. Hay un ámbito político importante. Aquí nos dedicamos también a otras cosas. Igual a alguno le da vértigo sentarse a negociar. Pero no me preocupa en exceso. Creo que es posible llegar a acuerdos en las cosas concretas. Otro tema es que para que dos acuerden, los dos tienen que estar dispuestos a acordar. Y salvo que a alguien le entre miedo escénico...