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2006
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Buen balance y mejor futuro

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Uztaila 02 | 2006 |
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Hacer el balance del primer año de legislatura tiene el inconveniente de su parcialidad, en tanto en cuanto, que a un Parlamento y a su trabajo hay que contemplarlo con la perspectiva del tiempo para el que ha sido elegido, es decir 4 años.
A lo largo de todas las legislaturas que he conocido, el desarrollo de la actividad parlamentaria ha seguido un guión parecido, un primer año con pocas leyes que van aumentando al segundo y tercero y que nos lleva a un cuarto año de actividad legislativa plena, pues los proyectos de ley se han madurado y todos queremos sacarlos adelante.

Si contemplamos el año legislativo transcurrido, nos encontramos con tres proyectos importantes aprobados por el Parlamento Vasco.

En primer lugar el año pasado aprobamos los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para el año 2006. Una ley importante que marca la política del Gobierno Vasco, cara a los ciudadanos y ciudadanas de la Comunidad Autónoma, que implica tomar decisiones para mejorar el "status" de vida de la sociedad vasca en general, en temas tan sensibles como la educación, la sanidad, el empleo, la cultura, fomentando el crecimiento económico con políticas concretas de apoyo a la innovación y la investigación, en definitiva política directas para seguir haciendo que nuestra Comunidad sea puntera en el Estado y se acerque a Europa y sus Estados más progresistas y avanzados.

Además, se han aprobado otras dos leyes importantes como la Ley de Aguas, estableciendo una política unitaria y global para un bien escaso y básico para la ciudadanía como el agua y la Ley del Suelo, (espero y confío que para cuando este artículo sea publicado haya sido aprobada definitivamente por el Pleno), una ley que tras el trámite parlamentario y gracias a la actitud critica y constructiva de EAJ-PNV, podemos presumir que va a ser positiva para intentar dar solución a temas tan importantes para amplios colectivos, sobre todo de la juventud, como es el tema de la vivienda.

Como proyectos de futuro, en este momento hay en trámite en el Parlamento Vasco otros siete proyectos de ley, dos de ellos, el de agricultura y alimentación ecológicos y el de Bibliotecas, han sido recurridos por la Diputación Foral de Araba ante la Comisión Arbitral, con su consiguiente suspensión de tramitación y otras cinco que han sufrido retrasos en su tramitación, porque sistemáticamente el PSE y el PP, han solicitado la ampliación de plazos para la presentación de enmiendas y, en la mayoría de los casos, no por necesidad, sino para dilatar y retrasar su tramitación parlamentaria, y decir que no se legisla.

No voy a referirme al resto de la actividad parlamentaria, a los planes sectoriales presentados por el Gobierno Vasco, comparecencias ante Comisión y toda otra serie de actividades llevadas a cabo en el Parlamento Vasco, pero si dedicaré unas líneas, a comentar la actitud del PP, su actitud obstruccionista y sectaria, sin llegar a acuerdos con nadie y en nada, cuyo "ley motiv" de actuación se ciñe a los planteamientos continuos en contra de la búsqueda de soluciones al conflicto vasco, bien en su vertiente de fin de la violencia de ETA, bien en su vertiente de acuerdos políticos sobre las reivindicaciones mayoritarias de la sociedad vasca.

Me quedaría hablar del trabajo futuro para el próximo año del Parlamento Vasco, más concretamente de la actividad parlamentaria del Grupo Euzko Abertzalea (EAJ-PNV) que, como siempre, va a seguir centrado en la solución de los problemas que le preocupan al ciudadano de a pie, con políticas sectoriales que ayuden, demagogias aparte, a la mayoría de la sociedad vasca a mantener unas condiciones de vida dignas, con una actitud clara por el diálogo con el resto de formaciones políticas a efectos de conformar mayorías amplias, que faciliten su aprobación.

Un último apartado, a la esperanza del momento que vivimos, en el que EAJ-PNV va a volcarse para que de una vez por todas la violencia desaparezca de nuestro país y el diálogo y el acuerdo entre los partidos sean las herramientas básicas, para que el pueblo vasco pueda decidir, en paz y libertad, su futuro.

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