El presidente del Euzkadi Buru Batzar, Andoni Ortuzar, y la cabeza de lista de EAJ-PNV y CEUS a las Elecciones Europeas del próximo domingo, Oihane Agirregoitia, han dado lectura, a sendas declaraciones ante más de 150 representantes públicos e internos de la formación jeltzale
El presidente del Euzkadi Buru Batzar, Andoni Ortuzar, y la cabeza de lista de EAJ-PNV y de la Coalición CEUS a las Elecciones Europeas del próximo domingo, Oihane Agirregoitia, han verbalizado esta mañana, en la Casa de Juntas de Gernika, la reafirmación de la formación jeltzale en su defensa de la Democracia, la Paz y los Derechos Humanos. Bajo el Árbol de Gernika, Ortuzar y Agirregoitia han dado lectura a sendas declaraciones ante más de 150 representantes públicos e internos de la formación jeltzale que han querido secundar con su presencia este solemne compromiso de EAJ-PNV a escasos cinco días de unas Elecciones Europeas que vienen marcadas, entre otros factores, por la amenaza del auge de los extremismos de izquierda y derecha, por el conflicto bélico en Ucrania y por la intolerable vulneración de derechos humanos en Gaza tras los execrables atentados terroristas de Hamás.
Este es el contenido de los textos leídos por Ortuzar y Agirregoitia.
Andoni Ortuzar
Para las vascas y los vascos, Gernika significa muchas cosas. A la sombra del roble, durante siglos, nuestros antepasados se reunían en asamblea para ejercitar la democracia. Por eso este enclave es símbolo de soberanía, de entendimiento, de libertad.
También Gernika es alegoría de paz. Símbolo del sufrimiento y de la regeneración frente a la barbarie. Y el roble que nos cobija representa la voluntad de un Pueblo, Euskadi, que desea vivir en armonía, prosperidad y justicia social en alianza e igualdad con otros pueblos del mundo, con los que queremos convivir y relacionarnos. Cada cual con su identidad, con su cultura, pero desde el respeto y la cooperación. Con voz propia en un concierto mancomunado.
A ese mundo miramos hoy. A la Europa que nos cobija y en la que queremos labrar nuestro porvenir.
Desde sus orígenes, vascas y vascos nos hemos vinculado al proyecto europeo, buscando compartir nuestro porvenir con los pueblos de nuestro entorno. Defendiendo nuestros intereses mutuos y construyendo lazos comunes que nos hicieran progresar en el devenir de los tiempos. Miramos a Europa porque somos Europa. En ella está nuestro lugar como comunidad nacional. Lo invocamos ya en el año 1918, cuando representantes de este Partido acudieron a Versalles ante la invocación por parte del presidente de los Estados Unidos de América, Woodrow Wilson, del derecho de autodeterminación para los pueblos europeos tras el final de la Primera Guerra Mundial. Lo repetimos en 1933, en la celebración en Donostia del segundo Aberri Eguna, cuyo lema fue precisamente ‘Euzkadi-Europa’. Lo reiteramos tras la Segunda Gran Guerra, en 1947, con nuestra representación en los Nuevos Equipos Internacionales, embrión del Movimiento Europeo y germen de la Comunidad Europea alumbrada por Schuman, Monnet, De Gasperi o Adenauer.
Participamos en el nacimiento del proyecto europeo. Un espacio común que huía del totalitarismo del fascismo y el nazismo, y también del estalinismo soviético en ciernes. Un proyecto de progreso alejado de los extremos y que pretendía establecer una paz duradera en el Continente tras siglos de enfrentamientos y de sufrimiento humano.
En esa Europa en construcción estuvo el Partido Nacionalista Vasco. Sabíamos muy bien, porque las habíamos padecido en carne propia, las consecuencias del fanatismo antidemocrático. Conocíamos igualmente las secuelas del abandono internacional frente a la agresión exterior. Por eso, Agirre, Landaburu, Leizaola, Irujo y otros tantos se sumaron desde el principio al proyecto de una nueva Europa.
Europa surgió como un proyecto que hiciera prosperar una paz duradera. Por desgracia, hoy asistimos a conflictos bélicos desgarradores con la invasión de Ucrania y la inhumana masacre llevada a cabo en Gaza tras las acciones terroristas de Hamás. Necesitamos urgentemente unir fuerzas para construir una defensa propia que garantice la seguridad de Europa y que haga que la voz de la Unión suene con firmeza en el marco internacional, posibilitando que callen las armas y comience un nuevo tiempo de paz para todos. Tampoco podemos permanecer impasibles ante la peligrosa tendencia hacia la radicalización de algunas expresiones políticas en el seno de la Unión. Débiles ante el exterior, rodeados de incertidumbres y desafíos, la opinión pública de nuestro entorno ha comenzado a replegarse hacia posiciones extremas y populistas. El caldo de cultivo perfecto para brotes radicales, contrarios a los Derechos Humanos.
Es por ello por lo que, con toda solemnidad , en Gernika, símbolo de las libertades y de la paz, el Partido Nacionalista Vasco proclama que:
1. Declaramos nuestro compromiso con la Unión Europea. Un proyecto democrático, social y económicamente próspero. Generador de riqueza, empleo y solidaridad. Integrador, respetuoso con la pluralidad nacional, territorial y cultural, y defensor de un mundo más justo, más libre, más seguro y pacífico en el que se respeten todos los Derechos Humanos.
2. Abogamos por una Europa en la que nadie es más que nadie: todos y todas nos debemos respeto en nuestras ideas, decisiones y actos. Ningún pueblo es más en dignidad que otro. Rechazamos el racismo, la opresión de un pueblo por otro, y defendemos el derecho a ser, a existir y a convivir conforme a su voluntad, carácter y valores de nuestro pueblo y de cualquier otro.
3. Ni una sola causa política puede situarse por encima de los principios básicos de la ética y el respeto a los Derechos Humanos, que constituyen un absoluto ético por encima de cualquier otra causa. Por eso, trabajaremos por el cese de todos los conflictos armados que sacuden el mundo, condenando sin paliativos la violencia extrema llevada a cabo contra la población civil indefensa.
4. No existe democracia ni justicia social sin igualdad. Las relaciones humanas solo cobran plenitud desde la igualdad de mujeres y hombres. Igualdad de oportunidades, de derechos y de deberes. Igualdad en la legalidad, en la participación activa, en la conciliación.
5. Manifestamos nuestra decisión de ser la voz de Euskadi en Europa. Y, como tal, defenderemos el Autogobierno; promoveremos la democracia, las libertades y los Derechos Humanos; seremos dique de contención de los extremismos y populismos, de la demagogia y el cortoplacismo; practicaremos otra forma de hacer política, transitando a cada momento por un camino reconocible y fiable; seremos, en definitiva, una vía central y centrada en cada institución, en cada Ayuntamiento, en cada Diputación Foral; una vía central y centrada en el Gobierno y Parlamento Vasco, en el Gobierno y Parlamento Navarro, en el Congreso y en el Senado; una vía central y centrada también, con Oihane Agirregoitia, en el Parlamento Europeo.
Oihane Agirregoitia
Aquí está el Partido Nacionalista Vasco. Por la democracia, por las libertades y en defensa de los derechos humanos. Donde siempre ha estado. ¡Preparadas y preparados para combatir el fascismo! Hace 88 años el Lehendakari Agirre juró aquí mismo cumplir con honestidad su mandato mientras los gudaris defendían la democracia y los derechos en Intxorta, entre Elgeta y Elorrio. Hoy vivimos en democracia. Tenemos derechos y libertades. Pero no podemos darlos por asegurados, porque será cuando empecemos a perderlos. Europa se construyó desde los escombros de la Segunda Guerra Mundial. No hay que olvidarlo. Y Europa vive hoy una encrucijada. Vemos cómo la proliferación de conflictos a nivel global hace más necesario que nunca reforzar el papel de la Unión Europea. Nosotras y nosotros somos referentes en la defensa de los derechos y libertades en todo el mundo.
Necesitamos una política exterior coherente:
La justicia social tiene que impulsar la solidaridad y la empatía, y desde este punto de partida, nuestro compromiso es:
Europa es el mejor lugar del mundo para vivir. Y debemos preservar los valores de democracia, libertad, justicia social, solidaridad, igualdad y diversidad. Posicionarse decididamente en contra de las vulneraciones de los Derechos Humanos. Y no, no creemos en la Europa de los bandos. Nosotras y nosotros siempre en la unidad, el acuerdo y la libertad. Contra el fascismo y contra los movimientos extremistas, tanto de derechas como de izquierdas. Nosotras y nosotros con la democracia. Estabilidad y bienestar, o populismos y extremismos.