Hace algunos meses, en este mismo Foro, Josu Jon Imaz amigo y ex compañero presidente del Euzkadi Buru Batzar contestaba, a preguntas de periodistas, algo así como que había que trabajar por cautivar a España. La polémica que suscitaron aquellas palabras sacadas de contexto creo que están en la mente de muchos de los presentes. Algunas y algunos, las calificaron de claudicación del nacionalismo, otros decían que eran las reflexiones de un encantador de serpientes. Hubo valoraciones, pues, para todos los gustos. Pero, estoy convencido de que no hay que tener miedo a las palabras y a su significado: cautivar, independencia, acuerdo, entendimiento... son palabras y conceptos, -aún cuando, en efecto, hemos de reconocer que somos dueños de nuestros silencios y reos de nuestras palabras pero, sobre todo, de la interpretación interesada o no y de su utilización- son conceptos, repito, cargados de contenido político e ideológico y que de una u otra manera forman parte de todos y todas nosotros.
Las palabras –insisto- y su significado, en ningún caso tienen por qué asustar a nadie. Lo que asusta y genera rechazo son los comportamientos, las actitudes, los virajes o los cambios de criterio, según los intereses electorales. Quién, sin duda, asusta y genera rechazo y desprecio absoluto es ETA. Asusta, pues, es terrorismo y asusta también la utilización política del terrorismo. Y separando lo anterior, asustan algunos jueces, y asustan mucho la verdad. Jueces al servicio de la política y de algunos políticos. Asustan también un poco los gobiernos de Madrid y sus responsables políticos, porque al final su actitud hacia Euskadi parece el sorteo de la lotería: tienen muy claro que quieren obtener su gordo pero no consiguen sacarlo a pesar de todas las vueltas que desde el 2001 le están dando al bombo electoral de Euskadi.
En cualquier caso, sin duda, de lo que hablaba Josu Jon Imaz -y lo que el Partido Nacionalista Vasco, desde que Juan Ajuriaguerra lideró hace ya más de 30 años nuestra candidatura a Madrid-, es de la necesidad de entendimiento entre España y Euskadi. Entre el Presidente del Gobierno español y el Lehendakari y entre los partidos políticos con el compromiso de respeto a la voluntad expresada por la ciudadanía. Sólo el trabajo constante, silencioso, en todos los "frentes" nos va a permitir también ayudar a conseguir la Paz. Estas son nuestras prioridades más absolutas, nuestro anhelo, el deseo de todo un pueblo. Está claro arriesgamos, hemos arriesgado y vamos a arriesgar para desde la política ayudar conseguir la Paz, porque en esto nos jugamos mucho, aunque no dependa de nosotros. Nos jugamos nuestro futuro y nuestra propia supervivencia como Pueblo desarrollado, por cierto, uno de los más desarrollados del mundo.
Este compromiso, el de la necesidad del entendimiento y el del acuerdo, está recogido en el primer punto de nuestro programa electoral –junto con un planteamiento de reforma estructural del Estado- y es, reflejo de la denominada Hoja de Ruta que el Lehendakari presentó ante el Parlamento Vasco el pasado mes de septiembre y amparado por el planteamiento del Partido Nacionalista Vasco recogido en su Ponencia Política. De nuestro programa y de nuestras propuestas, van a hablar nuestros candidatos Emilio Olabarria,
cabeza de lista al Congreso por Araba; Josu Erkoreka, nuestro portavoz en el Congreso y que encabezará nuestra candidatura por Bizkaia y Jose Ramón Beloki, primero en nuestra lista por la circunscripción de Gipuzkoa.
Ellos, y quienes les acompañan en el papel relevante e imprescindible que los hombres y mujeres del Grupo Vasco del Partido Nacionalista Vasco desempeñan, repito, van a ser los encargados de hablar de nuestros compromisos en Madrid. En el Congreso habrá en Madrid la próxima legislatura 18 diputados y diputadas vascas elegidos en la Comunidad del País Vasco. Y, curiosamente, son los 7 diputados y diputadas del Partido Nacionalista Vasco quienes han presentado, planteado y defendido prácticamente la casi totalidad de las iniciativas que tenían que ver con la calidad de vida, con el bienestar y con el desarrollo de nuestro autogobierno.
Los otros y otras, con la salvedad de la hasta ahora diputada de EA –como siempre dicen ellos y es verdad, además,- que suman más que los diputados y diputadas del Grupo vasco del Partido Nacionalista Vasco, han ejercido la labor para la que han sido elegidos y elegidas: votar para el PP y el PSOE las políticas y las iniciativas del PP o del PSOE. Y eso lo han hecho muy bien, no se han confundido ni una sola vez en primar los intereses del Estado al de los vascos y vascas. El PSE y el PP de Euskadi no han votado ni una sola vez en contra del criterio general de sus partidos, adverso a los planteamientos del Grupo vasco. Para nosotros Euskadi representa el 100% y para ellos, como mucho el 5%, y ni siquiera eso.
Sin una clara voz reivindicativa de la defensa de nuestros intereses ni un solo asunto que atañe al bienestar sería abordado en Madrid.
Bienestar y desarrollo derivados de la capacidad de autogobierno y que hoy exige una reflexión más sobre nuestro Concierto Económico al que Rodríguez Zapatero se ha negado a blindar bajo su mandato pasado y que dentro de unos días será sometido a vista de la Corte de Luxemburgo. Más que nunca es el momento en que toda la sociedad vasca, independientemente de su ideología, tiene que defenderlo y posicionarse a favor y en este sentido propondremos a todos los partidos vascos la firma de un compromiso en favor del emblema de nuestro autogobierno.
En todo caso, en ello y en lo anteriormente expuesto: desarrollo normalizado del autogobierno vasco, colaboración en la búsqueda de los caminos para la paz y normalización en la convivencia política de la sociedad vasca, se refleja el sentido del trabajo del Grupo al que representan Emilio, José Ramón y Josu.