Entrevistas
09Diciembre
2005
09 |
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Iñaki Anasagasti (Deia)

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Diciembre 09 | 2005 |
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Anasagasti: "Hoy día en Venezuela se está viviendo un régimen policial y autoritario"
El regreso de Iñaki Anasagasti a Venezuela como parte del contingente de observadores internacionales de las elecciones al Parlamento ha tenido algo de reencuentro con sus raíces, no en vano nació y vivió allí durante muchos años, y de comprobación de primera mano de la difícil situación que atraviesa el país. De nuevo en Euskadi, el senador del PNV se convierte ahora en portavoz privilegiado de los que más sufren dicha situación, con un acento especial en la amplia comunidad vasco-venezolana.

Desde su posición como observador de todo el proceso, ¿qué tiene que decir respecto a las reiteradas acusaciones de fraude electoral en Venezuela?

Hay una gran desconfianza en el sistema electoral venezolano, debido a un sistema electrónico de votación que no existe en ningún otro país del mundo. Eso siembra muchas sospechas, sobre todo porque tú no tienes capacidad para comprobar lo que has votado. Además, no se ha dejado auditar este sistema por ninguna auditoria independiente del Gobierno, no te facilitan el censo y el Consejo Nacional Electoral no es independiente, es gubernamental.

Aparte de eso, el sistema de proporcionalidad personalizada prima de una manera abusiva al partido más votado, las minorías no están respetadas y el que gana se lleva todos los votos. Ante este cúmulo de irregularidades y sospechas y, sobre todo, en un momento muy polarizado de la situación política venezolana, los partidos democráticos decidieron no presentarse a los comicios, porque iban a ser machacados.

¿Cuáles han sido las consecuencias de todo ello para el país?

En la actualidad hay un Parlamento monocolor, lo que deviene en un gravísimo problema para la democracia y las relaciones entre partidos. Creemos además que la actual polarización va a ir ‘‘in crescendo’’ si Chávez no echa un freno de mano y convoca una mesa de diálogo para hablar con la oposición, crea un nuevo Consejo Nacional Electoral, permite la utilización del censo y el chequeo de todos los votos para hacerlos transparentes. Si no, va a ser algo terrible.

El vicepresidente venezolano ya realizó un llamamiento para dicha mesa de diálogo nada más conocerse los resultados.

Sí, pero eso mismo ha ocurrido también en el pasado y nunca se ha llevado a la práctica. Chávez, el mismo día de la votación y con esa retórica ampulosa y de fantasma gorilero, dijo que habían muerto los partidos políticos y que ya habían cumplido su misión. Nosotros también nos hemos ofrecido, de alguna manera, a hacer de mediadores, pero vemos que es muy difícil.

¿La única posibilidad reside, por tanto, en la buena voluntad del Gobierno?

De su buena voluntad a la hora de establecer una mesa de diálogo o de la movilización popular, como ha habido en otros países, en el sentido de que no se arrugen, como no se han arrugado ahora con todas las intimidaciones que han tenido para acudir a votar, ya que no han votado. Sólo cuando los pueblos se ponen de pie es cuando triunfan, y la situación actual no se puede tolerar.

¿Hubo coacciones para ir a votar?

Sí, hubo una diputada chavista que dijo que «al que no vote, lo botamos», o sea, lo expulsamos, y lo dijo públicamente. Es que claro, si cuando uno va a sacar un pasaporte, pide un crédito, trabaja en un ayuntamiento o tiene que hacer un contrato con la administración, le sacan una lista diciendo «usted votó contra el chavismo, por tanto usted no puede hacer nada», eso no es una democracia, es un régimen autoritario.

¿Qué listas son esas?

Hay listas circulando por ahí en las que aparece lo que cada cual ha hecho en cada votación, si son opositores al régimen o no. Por eso, entiendo que la gente tenga desconfianza en el sistema, ya que el voto no es secreto, lo que en una democracia es fundamental. Si lo que yo vote va a ir contra mí, indudablemente, eso no es un sistema democrático, es un sistema policial, y hoy día en Venezuela se está viviendo un sistema policial.

¿Cómo se ha encontrado el país?

Aquí en Euskadi la opinión pública está confundida por las apariciones fugaces de Chávez metiéndose contra Bush, que incluso pueden gustar por ser quien es Bush, pero el 95% de la colectividad vasca en Venezuela es antichavista, porque conocen el problema y lo viven sangrantemente. Se quieren marchar del país porque no pueden vivir allí, y eso lo tiene que saber la opinión pública vasca.

¿Cuáles son los principales problemas a los que debe enfrentarse Venezuela?

Para combatir la pobreza hay que crear riqueza, y Chávez está destruyéndola. Este señor lleva siete años gobernando y ya no le puede echar la culpa al sistema anterior, porque ha tenido dinero más que suficiente para arreglar las cosas y no lo ha hecho. Él cogió el país a siete dólares el barril de petróleo y lo ahora tiene a más de 60 dólares. Tiene dinero para hacer y deshacer lo que le dé la gana, y está haciendo una política asistencial que no crea riqueza, que no lucha estructuralmente contra las desigualdades, e internacionalmente está haciendo el indio, comprando deuda a Argentina, vendiendo gasolina en el Bronx... Son cosas absolutamente demagógicas, que aquí pueden hacen mucha gracia, pero el país va al descalabro de cabeza.

¿Han tenido facilidades en su labor como observadores?

Nos han dado todo tipo de facilidades, yo creo que porque pensaban que iban a ganar, y no ha sido así por la altísima abstención, de cien ciudadanos 75 se han quedado en casa. Ahora será difícil que vuelvan a invitar a observadores internacionales, ya que la experiencia no les ha gustado nada pues todos los observadores internacionales hemos coincidido en que el voto tiene que ser secreto y no lo ha sido.

Por ser nacido y residente durante mucho tiempo en Venezuela, ha debido sentir esta tarea de una forma especial.

Sí, además ha sido terrible la cantidad de llamadas de gente que hacía tiempo que había perdido de vista que querían hablar, manifestarse... La verdad es que vengo abrumado del nivel de necesidad que tiene el vasco en Venezuela de ser entendido en Euskadi.

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