Joseba Arruti (Deia)
El máximo dirigente del PNV de Bizkaia, Iñigo Urkullu, cree que la tramitación parlamentaria del Plan Ibarretxe no será en vano, independientemente del resultado de la votación prevista para finales de mes, y asegura que, probablemente, ya nada será igual una vez dado ese paso.
EL FIN DE AÑO político viene marcado en Euskadi por la votación del Plan Ibarretxe, que tendrá lugar, previsiblemente, el próximo día 30 de diciembre. El presidente del BBB, Iñigo Urkullu (Alonsotegi, 1961) considera que, más allá del resultado, la tramitación de la propuesta ha sido fructífera.
Ha llegado la hora de la verdad para el Plan Ibarretxe. ¿Cómo valora el camino recorrido a lo largo de este año?
Creo que se ha avanzado mucho, ya que, pese a que se dice que la propuesta no ha concitado ninguna nueva adhesión más allá de las que reunía cuando fue presentada, se ha avanzado en la medida en que todos los grupos parlamentarios se han tenido que sentar a debatir sobre el articulado. Eso es importante en sí mismo.
No ha habido grandes avances...
Si se ha avanzado o no, en cuanto a que la fotografía inicial se haya modificado, es otra cosa bien distinta. Curiosamente veo una confluencia de intereses entre el PSE-EE y Batasuna para dejar al Parlamento, que representa a 3/4 partes de los vascos, fuera de juego. Buscan demorar la solución al problema hasta que mejore su situación particular. Batasuna, incluso, va a impedir que la sociedad vasca decida sobre su futuro.
¿Cree que Ezker Batua votará al final en favor del Plan?
Desde el principio supimos que EB iba a presentar su propia alternativa basada en el federalismo de libre adhesión, lo que no obsta para que en este trámite parlamentario que todavía está teniendo lugar haya enmiendas de los propios grupos proponentes. Esto obliga a una transacción en cuanto a los textos, para que nos sintamos todos a gusto. Yo confío en que, finalmente, EB votará en favor del Plan el día que se traslade al pleno.
Decía Begoña Errazti que la votación va a suponer «una victoria moral» para el Gobierno vasco. ¿Es suficiente?
Más que hablar de victorias o derrotas, yo considero que la propuesta ha generado un cambio en la situación política de la sociedad vasca y ése es un valor importante. Durante muchos años hemos vivido una situación que Elkarri llamaba de «empate infinito», de enquistamiento de posiciones, y ahora, tras la votación en el pleno, probablemente va a haber un antes y un después. La propuesta ha removido lo que eran ideas preconcebidas, posiciones fijadas de antemano, y aun cuando no se muevan de cara a la votación en el Parlamento vasco, sí se va a producir un aldabonazo para la actuación de los partidos políticos "a posteriori".
En caso de que la propuesta no consiga la mayoría suficiente, ¿estamos condenados a que el futuro del Plan se decida en las elecciones autonómicas?
PNV y EA, que nos presentamos en coalición hace tres años y medio, adquirimos un compromiso y lo hemos cumplido. Nos presentamos con un planteamiento claro ante la ciudadanía vasca para activar una propuesta en base a unas ideas determinadas, y ese propósito se ha realizado. De todas formas, creo que sucederán muchas cosas de aquí a que se celebren las elecciones autonómicas. En lo que nos atañe a nosotros, PNV y EA tenemos que seguir reforzando nuestro compromiso ante la sociedad vasca, manteniendo lo que es el espíritu y la letra de la propuesta como valor de lo que ojalá sea la reedición de la coalición.
¿Se dan las condiciones políticas necesarias para volver a presentarse juntos?
Creo que se dan las condiciones, aunque haya factores que se hayan podido modificar en los últimos cuatro años. En todo caso, la situación no ha cambiado en exceso en lo que se refiere a la reivindicación de que sea la sociedad vasca la que pueda decidir su propio futuro. Se dan las condiciones de generar ilusión desde unos principios claros de respeto a los derechos humanos, en orden a la búsqueda de un mayor autogobierno y de un mayor bienestar para los ciudadanos vascos.
¿Cómo valora la evolución de la posición de los partidos constitucionalistas?
Hay ya un reconocimiento de que el Estatuto de Gernika no concita hoy el consenso al que apelaban incluso aquellos que son herederos de quienes votaron en contra del propio texto estatutario. A mi modo de ver, también desde esta perspectiva, se dan las condiciones necesarias para reeditar la coalición PNV-EA.
¿Ve posible algún tipo de confluencia tras las autonómicas con quienes se oponen al Plan Ibarretxe, básicamente con el PSE-EE?
No sé cuál es el marco que quiere el Partido Socialista, que es quien tiene la responsabilidad de gobernar en el Estado español. No se ve al PSOE con ánimo de asumir con valentía el despegue respecto al Partido Popular, aunque por otra parte se dé la circunstancia de los apoyos de ERC para determinadas actuaciones. En cualquier caso, el modelo que planteaba el PSOE en el documento de Santillana del Mar no satisface en modo alguno lo que pueden ser las aspiraciones del nacionalismo vasco sobre el encaje institucional de la realidad sociopolítica vasca en el conjunto del Estado español.
¿Qué piden al PSOE?
Los socialistas deben tomar en consideración lo que ha sido la tramitación de la propuesta de Nuevo Estatuto Político hasta hoy, ya que es el indicador de la opinión mayoritaria de la sociedad vasca, porque todas las encuestan refrendan que los ciudadanos de Euskadi quieren ser consultados sobre su propio futuro. El PSOE tiene una asignatura pendiente en relación a la realidad política vasca, que requiere una solución acorde al contexto de los tiempos actuales.
¿Cómo valora que alguien como Joseba Arregi, que fue consejero de Cultura y portavoz del Gobierno vasco, se haya alejado del PNV y apueste por un modelo similar al del PSE-EE?
No me merece mayor consideración. No-sotros respetamos todas las ideas que puedan anidar en la sociedad vasca pero también digo con claridad y rotundidad que quienes se presentan a las elecciones son las formaciones políticas y que quienes gozan o no del respaldo de la mayoría de la sociedad vasca son, igualmente, los partidos. En el caso del PSE-EE, no se ve ningún modelo, no conozco ninguna propuesta concreta, sólo determinadas líneas que se nos dan a conocer con cuentagotas, primero de "más Estatuto" y ahora de reforma del mismo.
¿Percibe falta de discurso sólido?
En el PSE-EE o en sus aledaños lo que más interesa es el discurso de alternancia democrática en las instituciones vascas. Ése es el único discurso, el de la conveniencia de que el PNV pase a la oposición. Curiosamente es el mismo discurso que se escucha desde otros ámbitos, como los de Batasuna.
¿Qué le parece la formación de la plataforma "Aldaketa"?
Siendo respetables todos estos movimientos, que también han existido en el pasado y existirán en el futuro, no sirve para engañar a nadie la pretensión de imitar a otras plataformas que han funcionado en Catalunya o en otros lugares ajenos a la realidad sociopolítica de Euskadi. En este caso esconden tras de sí una apuesta por dar su apoyo a una determinada formación. Una plataforma que desee tener personalidad propia debe estar al margen de los postulados políticos y la secuencia de la presentación de "Aldaketa" nos lleva a pensar en su vinculación con el PSE-EE.
