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09-12-2015 Aitor Esteban en Bilbao - Memoria Histórica

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Diciembre 09 | 2015 |
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Es emocionante estar en este lugar porque tiene un significado especial. A mediados de junio de 1937 este lugar asistió a un acto de generosidad, a un último esfuerzo por parte de muchos hombres que lucharon y combatieron para que muchos otros se salvaran durante la retirada de Bilbao. Hasta aquí, hasta Artxanda, subieron unos cuantos batallones, aun sabiendo que ya estaba todo perdido, para que muchas otras personas, hombres, mujeres y niños, pudieran escapar, pudieran salvarse retrasando la caída de Bilbao. Es el mejor lugar para colocar este monumento que tenemos detrás de nosotros, ‘La Huella’. Porque claramente toda aquella generación dejó huella en nosotros y nosotras. Si hoy somos lo que somos y seguimos teniendo una personalidad como pueblo y hemos luchado por nuestros derechos y seguiremos haciéndolo, es porque les tuvimos a ellos de ejemplo.

¡Cuántos años después perseguidos y su voz silenciada! Evidentemente, en los últimos años, se han hecho cosas en su recuerdo. Pero aún seguimos con problemas. La Ley de Memoria Histórica no es perfecta pero no es mala. El problema es que las leyes hay que cumplirlas; hay que llevarlas a cabo. Hay que tener voluntad e iniciativa. Y lo que ha ocurrido es que durante los últimos cuatro años ha sido absolutamente ignorada por el Partido Popular.

Más que la ley, lo importante es la voluntad; una voluntad que el PP no muestra. El Gobierno español suprimió la oficina encargada de estos asuntos y ha eliminado también cualquier tipo de presupuesto para afrontar los retos de la Memoria Histórica. Sin embargo, como contraste, el Gobierno Vasco siempre ha tenido otra sensibilidad. Tenemos una oficina dedicada especialmente a estos asuntos. Ha habido siempre una sensibilidad especial y una sociedad civil también muy comprometida. Quisiera mencionar en esta labor, espero que no le moleste, a Paco Etxebarria, porque ha sido la persona que con su equipo, a nivel de Euskadi y también del Estado, ha marcado los estándares en la recuperación de cuerpos, fosas, etc. No olvidemos que estamos hablando de reconciliación, de paz… Y de eso el pueblo vasco tiene mucha necesidad y sabe que es un tema importante.

Recuperar los restos de nuestros seres queridos es importante. Es increíble que en muchos lugares del Estado no se haya acabado todavía el mapa de fosas y que incluso muchos ayuntamientos se nieguen a dar facilidades para que se puedan abrir esos enterramientos.

Es increíble que aunque la ley lo ordene, todavía haya placas con nombres de golpistas, de prohombres del franquismo en las calles. Euskadi es una excepción, puede haber alguna, pero en el Estado en muchos pueblos o capitales te encuentras con placas y monumentos a personas significadas en un golpe de estado. ¿Nos imaginaríamos esto en Alemania? Seguro que no, sería inaceptable. Sin embargo, en España el imaginario colectivo español lo toma como normal.

Y ¿qué ocurre con los archivos? Se supone que la Ley de Memoria Histórica iba a abrirlos totalmente. Pues todavía hay restricciones en el acceso a los archivos. Algunos de los datos, por ejemplo, quienes tomaron parte en algunos procesos, a quienes se les denunció… ¿Es posible que después de tantos años sigamos todavía así? O, ¿cómo es posible que tengamos todavía en el Estado una Ley de Secretos Oficiales de la época franquista (1968), que no fija ningún límite temporal para desclasificar documentos cuando en cualquier democracia, como el Reino Unido por ejemplo, están abiertos a la investigación todo tipo de documentos de más de 30 años?

El año pasado, alrededor de 300 investigadores e historiadores exigieron al Gobierno la desclasificación de 10.000 documentos militares del franquismo y la Guerra Civil, y la de los documentos diplomáticos de más de 30 años de antigüedad. No ha habido respuesta.

¿Cómo es posible que los documentos del Gobierno Vasco, de un gobierno legal durante la República, sigan estando en Salamanca y no se devuelvan a su legítimo dueño? ¿Son acaso una especie de botín de guerra? Si existe un Gobierno Vasco, es a él a quien corresponde custodiarlos. ¿Por qué no se los quiso devolver el gobierno de Rodríguez Zapatero? ¿Por qué tampoco lo ha hecho el de Rajoy?

¡Y qué pasa con los museos! Todavía hay museos y archivos del estado o del ejército en los que se exhiben banderines, insignias o banderas de sociedades y partidos políticos republicanos como si fueran una conquista. ¿Eso es normal en un país que dice que se ha reconciliado y que se jacta de tener aparentemente una constitución de encuentro? No es aceptable.

Nosotros tenemos ikurriñas en esa situación. Ikurriñas en museos de la Legión que se exhiben como “arrebatadas a las hordas rojo-separatistas”. Tenemos banderas que no son ni siquiera de los batallones, que son pertenecientes a nuestros batzokis y que están en el archivo de Salamanca. Por ejemplo la nuestra organización municipal en Gautegiz-Arteaga ¿Quién las ha llevado allí? Cuando hemos pedido su devolución, el gobierno se ha negado por boca de todo un ministro de justicia. ¡Vaya con el sentido de la justicia en España!

Cuando hemos pedido información sobre qué y dónde tiene el Estado, la respuesta ha sido tardía y oscura. Ningún dato concreto. Ninguna información mínimamente coherente y ordenada. No nos quieren dar información concreta de qué es lo que hay en los archivos y museos pertenecientes al Estado.

Y unido a esto: es una tomadura de pelo lo que hizo el gobierno del PSOE. Cuando se aprobó la ley de devolución de su archivo a la Generalitat de Catalunya, se consiguió introducir una cláusula por la que personas físicas y jurídicas podrían durante un año reclamar objetos, cartas, documentos que hubieran pertenecido a sus familiares directos o a ellos personalmente. Pero nadie se enteró porque no se hizo ninguna publicidad sobre este asunto por parte del Gobierno socialista; por parte de ninguna institución del estado. No salió en televisión, no salió en radios… no se dio información a la gente.

Entonces, así, ¿cómo es posible que la gente pueda reclamar lo que es suyo? Se tendría que haber empezado por lo contrario: haber hecho un inventario, haber localizado a las personas, o haber puesto al menos en internet ese listado para que la gente, en un periodo más largo de tiempo, pudiera reclamar lo que le pertenece.

EAJ-PNV va a reclamar en la próxima legislatura que se abra un nuevo periodo para que todos los particulares, asociaciones y partidos políticos puedan reclamar lo que es verdaderamente suyo y no lo que algunos consideran botín de guerra.

En definitiva, hay mucho que hacer y sobre todo hay mucho que sacar a la luz y devolver a sus legítimos dueños. Esta tarea no está terminada. Y el PNV se compromete a seguir adelante en esta labor.

 

Aitor Esteban. Bilbao. 09-12-2015

(El único discurso válido será el pronunciado por el orador en el acto. Balioa izango duen diskurtso bakarra hizlariak ekitaldian bertan eskaini duena da)

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