Aunque ahora ve poca televisión porque se está «desintoxicando» del exceso de zapping al que le obligaba su cargo de director de EITB, Andoni Ortuzar no olvida su etapa al frente del ente público. En una de las paredes de su despacho cuelgan unos bertsos con los que le despidieron sus compañeros. Los traduce palabra por palabra y aún le queda tiempo para hacer honor a su fama de buen conversador antes de encender la grabadora. - ¿Ha empezado ya la campaña de las elecciones de 2011? - En Euskadi siempre estamos en campaña.
- ¿No es una exageración entregarse al desgaste del adversario un año y cuatro meses antes? - Eso no lo dirá por el PNV. No estamos haciendo desgaste ni hemos empezado con el mensaje electoral. Sí que ha habido manifestaciones en PP y PSE sobre la conveniencia de proyectar su pacto a diputaciones y ayuntamientos. Nuestra única y lógica defensa es intentar ser más que ellos. Convencer a la gente de que el PNV es mejor que la 'große koalition', que decían los alemanes.
- Dice que sería extravagante que el PSE tuviera responsabilidad de gobierno en Vizcaya. ¿La alternancia es extravagante para el PNV? -La alternancia hay que conseguirla en las urnas. Que ya haya alguien que esté haciendo sumas para desplazar a un partido, el PNV, que está muy cerca, si es que no lo consigue, de la mayoría absoluta, sí es un poquito extravagante. O fuera de lugar. No responde a la normalidad en la que dicen que vivimos, porque lo normal es que gobiernen los partidos mayoritarios.
- O los que logren sumar más apoyos en torno a su proyecto. -Entonces son lo mismo. Ya no son dos partidos, sino una opción electoral única. Y eso es lo que tienen que aclarar a la ciudadanía.
- ¿Han hecho caso a Egibar cuando pidió una oposición «más cañera»? -No. Estamos haciendo una oposición proporcional y proporcionada. Medida y estudiada. Primero intentamos situar bien a la sociedad sobre lo que suponía el pacto PSE-PP. Después hemos hecho una oposición responsable, que va a seguir, poniendo sobre la mesa alternativas e iniciativas como el pacto de estabilidad.
- ¿Y ahora? - Estamos haciendo una oposición clara. Criticamos la parálisis del Gobierno. El Presupuesto que ha hecho ha sido frustrante. Si quitamos los créditos de compromiso del TAV, ha crecido más de un 1% pero las inversiones se han reducido en casi un 11%. El incremento se ha producido en gastos de personal y en gasto corriente y en amortizar la ingente cantidad de deuda.
- ¿No está mediatizada su gestión por la crisis? - Cuando llegaron, tenían 1.500 millones de tesorería en las arcas del Gobierno vasco y 600 más en las sociedades públicas. Estaban comprometidos, sí, pero estábamos en octubre. ¿Qué necesidad había a esa altura del año de incrementar en 1.000 y pico millones más el endeudamiento? Tampoco es normal que en época de crisis el costo en funcionarios suba un 3 y pico. No puede ser que bajen las políticas en I+D+i...
- El Gobierno niega la mayor... - Lo vemos en las respuestas parlamentarias a nuestras preguntas.
- Se ha acordado con el PP adelgazar la red de sociedades públicas. - Ése es otro de los mitos, como el de que se encontraron con la caja vacía. Tendremos probablemente el sector público más aquilatado de todo el Estado. Reto a quien sea a un debate público sobre eso. Porque la segunda parte del mito es que esa red es la maquinaria que engrasa al tejido industrial del PNV.
- Algunos lo llaman 'chiringuitos'. - Que hagan uno por uno el análisis y veremos cuántos cierran. Hemos convivido con el PSE en gobiernos de coalición y algún chiringuito hemos tenido que cerrar. Sabemos como gestionan. Ahora hay buen dimensionamiento y todas las empresas públicas tienen gestión eficiente y un objeto social muy concreto.
- ¿Se han embarcado en una campaña de desgaste del lehendakari para sacar la cabeza una vez cerrada la etapa presupuestaria? - Una etapa en la que López ha estado desaparecido. Ha sido el gran ausente de los grandes acuerdos de este país en los últimos meses. Lo ha estado de los debates del Concierto y del IVA, ha hecho un papelón con las políticas activas de empleo y encima ha reconocido que tiene un déficit de comunicación con el PNV que no sabemos si va a subsanar.
- ¿No confían en que la comunicación pueda ser más fluida? -Veremos lo que da de sí, vamos a dar una oportunidad al diálogo. López sólo ha estado presente en las portadas, la nada envuelta en celofán. Pero no ha estado en la sala de máquinas de la política vasca. Ha estado más Rodolfo Ares en unos casos y su partido en otros. Y ahora, consciente de su falta de solidez, se ha embarcado en una política de comunicación que será la misma nada pero con celofán de más colores.
El camarero y la bandeja - ¿No sobreactúan? - Me acuerdo de aquel episodio en el que Alfonso Guerra dijo que Felipe González era un buen camarero que servía bien las políticas que él mismo cocinaba. Aquí parece que López va a ser un mero camarero que sale cada cierto tiempo con la bandeja de las ocurrencias de alguien. No hay cocina en este Gobierno, vemos mucha debilidad, mucho plato precocinado, no hay cocina de autor. Es preocupante que sólo esté pensando en la portada del periódico del día siguiente. Estamos siendo duros porque la situación lo es.
- ¿Vender imagen no es común? - Pero aquí lo único que hay es imagen. Lo hemos visto en el 'Alakrana' y ahora con el famoso comité asesor económico. Han dejado en una postura desairada a un montón de gente que lógicamente tiene que decir que sí, pero que ha visto utilizado su nombre como si fuera una galería de trofeos. Es poco serio.
-¿Mantienen que López no tiene en cuenta a la «mayoría social» nacionalista? - Lo veremos con el paso del tiempo. Muchos integrantes son del PNV y les dirán las mismas cosas que nosotros. La pregunta es si les va a hacer caso o será un 'comité florero'.
- Con estos mimbres, ¿espera algún acuerdo de la reunión del viernes entre López y Urkullu? - Nada de todo esto genera un clima favorable. Primero te insultan diciendo que esto es un gallinero y ponen en duda la autoridad de Urkullu, después utilizan el nombre de personalidades vinculadas al nacionalismo. Hace seis meses fuimos con un decálogo de propuestas. No obtuvimos respuesta. Ahora vamos a reeditar propuestas buenas para este país. La respuesta está en manos de López.
- Entonces, ¿van a escuchar, a proponer o a desgastar? - Nos gusta escuchar y proponer. Desgastar no es nuestra táctica, el propio Gobierno va acabando él solo con su crédito.
- ¿En qué asuntos podría haber margen para el acuerdo? ¿Por ejemplo en la lucha contra ETA? - Curiosamente ha dejado de haber tensión sobre ese tema y no hemos cambiado un ápice. Eso quiere decir que antes había una crispación artificial para utilizar el terrorismo contra el PNV e Ibarretxe. En lo nuclear estamos de acuerdo.
- ¿El PNV quiere de verdad cerrar acuerdos con López o prefiere puentearle en beneficio propio? - Hablamos en el ámbito estatal porque se nos llama y somos relevantes. El PSOE es el que tiene las contradicciones. No hemos intentado nunca puentear a los socialistas vascos para hacer pinza y desestabilizarles.
- ¿No ocurrió eso con las políticas activas de empleo? - Es que en ese tema habían hecho una chapuza y nos habían engañado. Nos dijeron que la transferencia se iba a producir el 1 de enero y el Gobierno central nos avisó ya en octubre que era imposible. Pero no les hemos hecho ninguna pinza. Ya que ellos no defienden la letra y el espíritu del Estatuto, nosotros sí.
- Permítame parafreasear a Urkullu. ¿Dónde ponen los huevos las gallinas del PNV? - En este país. Sólo hay que hacer un análisis de texto de lo que decimos unos y otros: no veo la más mínima fisura ni discrepancia en el discurso del PNV.
- Por ejemplo, donde Egibar ve un proceso sin marcha atrás en la izquierda abertzale, en Urkullu es abierto escepticismo. - En este tema podemos ser todos víctimas del cliché sobre cada uno de nosotros. Oí las declaraciones que había hecho Egibar y eran muy parecidas a las mías, pero a mí me sacan la primera parte y a él la segunda. Decimos lo mismo.
- Otro. Usted intentó con el PSE un documento de mínimos contra ETA y Egibar dijo después en el Parlamento que las políticas antiterroristas son incompatibles. -Estábamos hablando de la Ley de Partidos, que para nosotros no es política antiterrorista. Claro que no vamos a llegar nunca a un diagnóstico compartido sobre esa ley, lo que no quita que tengamos una posición común y nítida contra el terrorismo.
- ¿No les urge elegir a un candidato para evitar que estos debates se sigan reproduciendo? - No. Ahora nuestro quehacer es evitar que el Gobierno López rompa el país. Y preparar las elecciones de 2011 porque PSE y PP quieren hacer el segundo asalto. Han asaltado la primera muralla y quieren entrar al 'sancta sanctorum' del país.
- ¿Hablando así, no da la sensación de que creen que el país es suyo? - Noooo. Éstos quieren que sea suyo. No es nuestro ni de ellos, es de la gente. Nosotros estamos en los sitios; los que dicen que para que este país sea normal hacen falta alcaldes y diputados españolistas son ellos. Jamás hemos desacreditado al alcalde de Donosti por ser socialista ni hemos dicho que es una anormalidad. Y eso que es la capital donde la identidad vasca puede ser más fuerte. ¿Y para que Vizcaya sea normal tiene que tener de diputado general a Pastor?