Iñigo Urkullu
13Uztaila
2008
13 |
Elkarrizketak

El Diario Vasco

Iñigo Urkullu
Uztaila 13 | 2008 |
Elkarrizketak

Urkullu: "No estamos negociando un nuevo alto el fuergo con ETA"
Iñigo Urkullu quiere marcar perfil propio cuando asegura que el PNV va a gestionar «con absoluta responsabilidad» los pasos que haya que dar tras una posible suspensión cautelar por parte del Tribunal Constitucional de la consulta aprobada por el Parlamento Vasco. «No vamos a hacer fuegos de artificio», sostiene.

- Unai Ziarreta afirma que la consulta se llevará a cabo aunque se prohíba y usted dice que el PNV acatará la ley. ¿En qué quedamos?


- Hay un ámbito institucional y otro que afecta a los partidos. Estamos en el tiempo de reflexión. Iremos analizando los pasos que como PNV vayamos a dar o que pondremos en común con los partidos, salvo EHAK. Respeto mucho lo que diga EA pero no me compromete. Nosotros vamos a acatar la legalidad.

- ¿Contempla iniciativas de desobediencia civil?

- Uno puede lanzar cuatro titulares atractivos para la sal gorda, pero a nosotros nos corresponde gestionar ese proceso desde las instituciones con la máxima responsabilidad. No vamos a hacer fuegos de artificio.

- ¿Están ustedes incómodos?

- Hasta el momento hemos gestionado una iniciativa institucional presentada el año pasado. En este momento entramos en otro tiempo de gestión en el que el PNV tiene que sopesar también las consecuencias de lo que se ha hecho hasta ahora. No porque no estamos de acuerdo sino para calibrar bien los pasos a dar con absoluta responsabilidad.

- Pero se avecina un gran conflicto institucional.

- Habrá que apelar a la responsabilidad de estadista de Zapatero. Puede encontrarse con un conflicto de identidades nacionales, tanto en Euskadi como en Cataluña. El PSOE juega a corto, cómodo en el conflicto político e institucional. No es que nos sintamos ni cómodos ni incómodos. No nos gusta ese escenario.

- ¿Cree que la sociedad vasca quiere un choque de locomotoras?

- No, no lo quiere.

- Es que incluso puede que la sociedad vasca 'pase' cada vez más de todo el debate de la consulta.
 
- No es que pase, pero percibe con toda normalidad que se convoque una consulta más allá de los grandes titulares. No hay una correspondencia entre el dramatismo que ponemos los partidos, como consecuencia del no del PP y del PSOE, y la ciudadanía.

- ¿El PNV quiere volver a la campaña electoral del 2001, cuando tenía como gran rival a Mayor?

- No, porque sería volver a las trincheras que tanto el PSOE como el PP y UPN quieren.
No al 'monotema'

- Parece que van a recurrir al victimismo.

- No, a una sociedad le tenemos que ofrecer otro tipo de discurso, no el victimismo. La necesaria denuncia tiene que venir acompañada de una política responsable. Y el PNV es consciente de que está jugando en un terreno embarrado. No queremos hablar del 'monotema' permanentemente.

- ¿El PNV históricamente más moderado ha perdido la batalla?

- En absoluto. No es una cuestión del PNV moderado o arriesgado, sino del PNV responsable.

- ¿La dinámica radical está arrastrando al PNV?

- Hay una cierta percepción de eso. El PNV nació para intentar transformar la sociedad -que es lo que estamos intentando plantear en el 'Think gaur Euskadi 2020'- pero también aspira a la recuperación de la soberanía nacional. Seguimos siendo fieles a nuestros principios, pero somos conscientes en cada momento de cual es el contexto. El PNV busca un acuerdo político integrador con los partidos. ¿Qué es lo que ha ocurrido? Que el PP no se ha querido sentar con el PNV, que el PSE y el PSOE juegan a corto plazo, y nos dice que no hay nada que hablar con nosotros mientras no esté Batasuna presente. Algo que no es posible porque de nuevo se han impuesto en ese mundo quienes se han venido imponiendo desde la V Asamblea de ETA, que es la organización terrorista.

- ¿Hay dos velocidades entre usted al frente del PNV y el lehendakari?

- No, hay que hacer pedagogía en torno a la bicefalia del PNV. El lehendakari es una figura institucional. Otra cosa es el PNV. Que haya dos planos distintos no implica que haya divergencias, son planos autónomos, además somos conscientes, tanto el lehendakari como el PNV, de la responsabilidad que tenemos.

- ¿Se siente desautorizado personalmente porque al final no se incluyera en la primera pregunta de la consulta una condena más expresa a ETA como usted quería?

- No, no me siento desautorizado, soy consciente de los contextos que se dan en cada momento. Yo, lo he dicho públicamente, había valorado que en orden al propio proyecto de ley pudiera haber incluso un preámbulo, una matización sobre lo que es la propia condena de ETA. No fue así y no voy a entrar en las razones de por qué no fue así. Tengo la conciencia muy tranquila, personal y políticamente.

- Que no apareciera esa condena expresa da a pensar que se busca el apoyo de la izquierda abertzale...

- Ése es un juego muy atractivo para la polémica, pero al final, ese mundo hará lo que no sé quién decida, pero no por lo que nosotros le hayamos puesto o no en bandeja.

- ¿El debate de la consulta va a quitar argumentos o va a dar nuevas excusas al mundo de la violencia?

- A mí me gustaría que la consulta se pudiera celebrar. La experiencia nos dice que ETA no ha hecho nunca caso al mandato de la sociedad vasca, pero es que la consulta no afecta sólo a ETA sino al acuerdo entre partidos políticos.

- Egibar ha adelantado que denunciarán a Zapatero ante Europa.

- Estamos hablando del impedimento de una consulta. Por eso pensamos en una batería de medidas. A pesar de que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre la Ley de Consulta, hay un camino judicial a recorrer.

- ¿Le resulta incómodo el voto de EHAK a la Ley de Consulta?

- No me ha gustado porque me parecía un ejercicio de cinismo. Busca hacer el menor daño posible a su mundo y el mayor al PNV.

- ¿Sigue creyendo usted en los acuerdos 'entre diferentes'?

- Sí porque parto de la base de que en Euskadi hay diferentes sentimientos de identidad nacional.

-¿Y en un acuerdo transversal?

- Se han caricaturizado los acuerdos transversales, hay una acepción muy peyorativa. La transversalidad es también un acuerdo entre el PSE y Batasuna.

- Se empeñan ustedes mucho en ese diálogo. ¿Tanto lo temen? ¿No está a años luz?

-Hoy da la impresión de que estamos a años luz porque hubo un proceso fallido, pero a mí no se me hace extraño que el PSE y Batasuna pudieran incluso haber hablado para que en un escenario a corto plazo pudiera haber alternativas al PNV en el gobierno. Eso me parece legítimo. Pero no lo es que hoy me sirva ese discurso y mañana no como consecuencia de ETA, y de paso seguimos manteniendo el bloqueo político.

- ¿Se podrá reeditar la mesa de Loiola?

- Hemos dicho ya que el próximo intento tiene que ser luz y taquígrafos, con sanción parlamentaria. En política no se puede negar que haya ámbitos de discreción. El PNV no está en este momento en ninguno de ellos.

- ¿El PNV está negociando un nuevo alto el fuego de ETA?

- No está negociando. Desde el 30 de diciembre de 2006, desde el atentado de Barajas, hemos dicho que es necesario un alto el fuego definitivo.

- ¿Le consta que haya habido una minitregua en torno al debate de la consulta?

- No me consta que haya habido una minitregua. Hemos podido convivir en unos días en los que no ha habido actos de violencia, pero ha seguido habiendo cartas de extorsión o actos de violencia contra el PNV. Creo que hay una interpretación interesada por parte de algunos de imputar supuestamente o dejar la sombra de duda de que el voto de EHAK es consecuencia de un clima determinado o de que ETA pudiera haber favorecido la aprobación de la Ley de Consulta.

- ¿Vería conveniente una gran coalición por el derecho a decidir?

- A la sociedad vasca hay que ofrecerle proyectos claros, no sólo un envoltorio. Y pensar en una gran coalición puede hacer correr el riesgo de pensar en el envoltorio.

- ¿Ganarán las autonómicas?

- Claro, estoy convencido de que lo podemos conseguir.

- ¿Pero esta vez es más difícil?

- Esta vez no podemos hacer lecturas tópicas y estáticas. Somos conscientes de las dificultades que se han producido dar en los últimos años y de la evolución de la sociedad vasca, pero eso lo tomo para trabajar con ilusión.

- El Euskobarómetro augura que el tripartito lo tiene complicado para alcanzar mayoría.

-Veremos. En los diferentes ámbitos institucionales hemos gobernado solos, con mayoría absoluta, en minoría y en la oposición. El Euskobarómetro, en todo caso, refleja la pérdida de credibilidad del PSOE y la realidad del PSE con respecto a las generales.

- ¿Qué opina de la elección de Imaz al frente de Petronor?

- Imaz dijo que se puede hacer país desde muchos ámbitos, no sólo desde la política. Además de ratificarlo, subrayo que se puede ser nacionalista sin que eso tenga que estar ligado al compromiso político en primera línea. Le deseo el mejor de los éxitos.

- Ha dicho Arzalluz que es un mal ejemplo para la juventud.

- Esas críticas se descalifican por sí mismas. Una persona que ha sido consejero de Industria, europarlamentario, con 44 años, ¿por qué no es un buen ejemplo para la juventud vasca y sí lo puede ser una persona de 38 años director general de cualquier otra empresa? Para la juventud vasca hay que intentar que aquí haya una calidad de vida que incida en las opciones de las nuevas generaciones para emanciparse. Despreciar la valía de Josu Jon Imaz es injusto. Le han propuesto por su capacitación profesional y personal.

- ¿Aquel comentario sobre su preferencia de que ganase Rusia la Eurocopa fue un error?

- No fue un error porque sería tanto como renunciar a la libertad personal de opinión. Se sacaron de contexto las palabras, se manipularon. Dije que quería que ganara Rusia porque Euskadi no podía ser campeona, lo razoné porque había jugado bien frente a Holanda. Lo hice desde un parámetro deportivo. También se ha manipulado al decir que yo he reculado al felicitar luego a la selección española después de que hubiera ganado la Eurocopa. No, he felicitado a la selección española porque ha sido la mejor y ha jugado muy bien en los partidos posteriores. No sé por qué necesariamente tenemos que hacer un ejercicio de patrioterismo, que no de patriotismo.

PARTEKATU