Parece que las cosas se mueven. Se anuncia el principio del fin. Y de eso se trata, aunque todos estamos convencidos que si desaparece la violencia en Euzkadi van a cambiar muchas cosas. Quizás vuelva a aflorar el debate ideológico porque si algo es la política es diferenciación. Yo vendo patatas, tú zapatos, el otro neveras. Y es el ciudadano el que opta, aunque también sea cierto que algunos venden a la vez zapatos, neveras y patatas pero lo normal suele ser que cada quien haga las ofertas que crea conveniente. A eso se le llama programa electoral. Y es en las elecciones cuando el ciudadano elige. Así funciona la democracia.
Viene esto a cuento de la respuesta que me ha dado la Secretaria de Comunicación de EA, Onintza Lasa, que nos dice que ahora lo prioritario “es que se solucione de una vez el conflicto político y el problema de la violencia”. Nadie lo duda. Es más, no hay partido que diga lo contrario. Hasta el PP, claro está, a su manera.
Decía la Sra. Lasa que yo vertía “una serie de acusaciones y falsas suposiciones sobre EA”. Se equivoca. Yo basé mi argumentación en dos premisas. La primera es que el eje estratégico PNV-EA es el motor de la construcción vasca y el otro que me había llamado la atención, leyendo la entrevista publicada en este diario al presidente de EA de Gipuzkoa, Iñaki Galdós, que mostrara su discrepancia sobre el hecho de que dirigentes de EA acudieran al BEC y su comentario, para mi esencial y que cada vez se hará más presente y que no es otro, como el pretender saber cuál es el modelo de sociedad que defiende cada uno.
Si no le gustaron mis apreciaciones lo puedo entender. Lo inquietante para ella debería ser que tampoco le gustan las de Iñaki Galdós, presidente del sector mayoritario en Gipuzkoa de EA, y eso le debería hacer reflexionar.
Reconozco que estoy algo cansado que lo abertzale y el abertzalismo me lo definan quienes seducidos por la violencia y el terror creyeron que esa era la vía adecuada para este país, sin el menor estremecimiento hacia el dolor humano y pensando que el fin justificaba cualquier tipo de medio.
Como usted sabe, el EAJ-PNV tiene 111 años de existencia y sabe algo de lo que es el patriotismo y la construcción nacional. Hijo del exilio de mis padres fui, junto a Joseba Goikoetxea y Bingen Zubiri, uno de los tres últimos del PNV detenidos por la dictadura y creo que en abertzalismo no tengo que esperar a un acto del BEC, de Anoeta o la rueda de prensa de los Sres. Otegi, Permach o Barrena par saber en qué consiste el patriotismo y la verdadera y auténtica construcción nacional, no ese camuflaje de los que quieren construir país sin contar con la voluntad y la opinión de los que viven en dicho país. Quiero por tanto saber qué hay detrás de la palabra Euskal Herria, término por cierto permitido en el franquismo no así Euzkadi, y si se van a respetar las reglas de la democracia: libertad de expresión, aceptación de los resultados, respeto al adversario político, modelo de sociedad, valoración del ser humano, ya ve, ese tipo de minucias de las que nunca se habla porque el grandilocuente término de construcción nacional lo tapa todo. No debe ser construcción nacional el que los vascos estemos conectados en media hora con todas las capitales o que se construya una Archivo Nacional Vasco o que en 26 años se haya recuperado de manera prodigiosa un euskera que estaba en peligro de desaparecer y que gracias a las políticas implementadas desde la administración ha logrado frenarse su extinción. Pero eso no es construcción nacional. Solo lo es lo que defina Batasuna y es ahí donde veo a un sector de EA, falto de autoestima, seducido por los cantos de sirena de una organización que no solo marca su peculiar abertzalismo sino que no quiere absolutamente a nadie al lado suyo.
Me dice la señora Lasa que no es su estilo utilizar las páginas de los periódicos para arremeter en contra de sus socios. Esto sería verdad si yo lo hubiera hecho, pero simplemente me limité a destacar la declaración de Iñaki Galdós que me pareció del mayor interés porque creo es la madre del cordero de lo que se va a jugar en este país en breve: El modelo de sociedad, porque en cuanto a abertzalismo, ahí no creo nos gane nadie.
Escribe que desconoce si sigo la actualidad política vasca. Pues sí. No hago más que eso desde mi primer berrido y además hablo con muchísima gente, en Euzkadi y en Madrid, me muevo por todas partes, doy charlas y escribo hasta en la punta de una servilleta y trato de no escuchar y ver solo EITB, porque me quedaría sólo con la mitad de la información, ya que se está haciendo una información pública por cupos. De ahí mi interés por lo dicho por Iñaki Galdós en este periódico que no me impide leer Gara todos los días o escuchar la COPE, la Ser y el Diario Vasco. Con todo ese potaje informativo me voy haciendo poco a poco una razonable composición de lugar.
Esa composición de lugar me hace sonreír cuando Onintza Lasa dice que “algunos miden el valor de una coalición únicamente en escaños. Otros preferimos medirla en términos de objetivos cumplidos”.
Eso suena de forma excelente aunque mis compañeros me suelen decir que no es precisamente la postura de algunos dirigentes de EA a la hora del reparto de puestos de representatividad donde EA, con toda energía, defiende dada milímetro de poder con el cuchillo entre los dientes, si me permiten la expresión. Sobre lo de los objetivos cumplidos me gustaría me dijera, dejando de lado las grandes palabras, qué tipo de objetivos cumplidos podrá usted llevar a su partido al término de la legislatura municipal en Tolosa. Tengo entendido que usted se presentó a las elecciones sola obteniendo su candidatura la mitad de concejales del EAJ-PNV.
Encabezaba esta candidatura Jokin Bildarratz quien gobierna el municipio con ustedes y que tras estos cuatro años podrá presentar un espléndido balance de actuación y de construcción nacional en Tolosa, a pesas de que dos concejales de EA se abstuvieran, sin informar a nadie, en la reciente aprobación presupuestaria en consonancia con lo que hizo Batasuna ante el Plan del Lehendakari.
Le pongo este ejemplo porque partido sin votos es como banco sin dinero. No desprecie usted los escaños democráticos pues lo está haciendo de los ciudadanos que han depositado su fe en un partido y en una persona y sobre todo no pretenda escapar de la realidad usando grandes palabras.
Sigo creyendo con el Sr. Galdós que el eje estratégico PNV-EA es le motor de este país y me sigue preocupando que existan buenos abertzales que confundidos por una palabrería patriotera vacía no se den cuenta dónde está lo principal y dónde lo accesorio.